Diseñar exhibiciones es diseñar experiencias en cuatro dimensiones:
una totalidad técnico-conceptual que es tanto espacio como es tiempo,
una situación particular por la que la persona transcurre
aunque a su vez regula y ordena.
Diseñar exhibiciones es diseñar experiencias en cuatro dimensiones:
una totalidad técnico-conceptual que es tanto espacio como es tiempo,
una situación particular por la que la persona transcurre
aunque a su vez regula y ordena.