«La nueva educación debe enseñar al individuo cómo clasificar y reclasificar información, cómo evaluar su veracidad, cómo cambiar las categorías cuando resulta necesario, cómo moverse de lo concreto a lo abstracto y viceversa, cómo considerar los problemas desde nuevas perspectivas – cómo enseñarse a si mismo. El analfabeto de mañana no será la persona que no sepa leer; será la que no haya aprendido a aprender.»

Herbert Gerjuoy (Future Shock, 1970, p. 271)

Hackear al museo.

¿Una visita al museo guiada por alguien que no tiene nada que ver con el museo?

Una visita guiada por alguien que se ha apasionado, pero que a su vez no está envuelto en discursos prefabricados acerca de cómo deberían ser las cosas, acorde a los estándares que van dictando las modas y el manual del buen divulgador y consumidor de «cultura».

¿Por qué no? Esto podría ser parte de lo que se llama hoy hackear a los museos.

www.museumhack.com

Diseño Universal

Chris Downey es un arquitecto de San Francisco, California, que quedó ciego en el 2008. Habla en esta charla sobre su ciudad antes y después, cuenta como él piensa que el diseño que mejore su vida puede en realidad mejorar la vida de todas las personas, videntes o no.

A través del diseño universal de museos y exhibiciones, intentamos dar cabida a las personas con discapacidad. Aunque el otro beneficio es el mayor alcance y participación a toda la comunidad. Después de todo, el objetivo de los principios del diseño universal es crear algo con utilidad para todas las personas. El diseño universal tiene siempre presente y en todas las instancias al destinatario, se practica desde un comienzo y no para emparchar cuando las cosas ya están hechas.

Escuchar a Chris Downey, con los museos en mente, estoy seguro que sensibiliza en cuanto a cuáles son las necesidades evidentes para solucionar, pero lo mejor es que genera la empatía para imaginar cuanto más todavía es posible.

 «Así es que si se diseña una ciudad pensando en los ciegos, entonces podríamos tener una rica red de veredas transitables, con una densa matriz de opciones y alternativas a nivel de la calle. Si se diseña una ciudad con los ciegos en mente, las veredas serán predecibles y serán generosas. El espacio entre los edificios estará equilibrado entre personas y automóviles…»

«… Si diseñas una ciudad con los ciegos en mente, tendrías un amplío sistema de transporte masivo, accesible y bien conectado con todos los sectores de la ciudad y los alrededores…»

«… Al diseñar una ciudad para los ciegos, espero que comiencen a darse cuenta de que en realidad sería más incluyente, más equitativa, más justa, sería una ciudad para todos. Y en base a mi experiencia previa como vidente puedo decir que suena como una ciudad muy atractiva, para vos si sos ciego, si tenés una discapacidad o bien no has encontrado la tuya todavía.»

 

«Las analogías no prueban que algo sea verdad, pero pueden hacer
que nos sintamos como en casa.»  Sigmund Freud

 

Afinar el lápiz

Nos encanta leer revistas, nos exigen poco, nos gusta su manera porque podemos recorrerlas brincando de foto en foto, incluso desde atrás hacia adelante. No son como los libros, no nos demandan disciplina para seguirlas. Con las revistas nuestra manera de aproximarnos al contenido va desde observar una imagen a leer su epígrafe y luego (si es que nos motiva) tal vez un artículo completo.revistas

La visita a una exhibición puede ser similar. La atención del visitante de museo por lo general brinca entre las vitrinas atraída en primer lugar por los objetos -después de todo de eso se trata, de la confianza en su autenticidad. Algunas personas van un poco más allá y en su curiosidad pueden que lean los rótulos o etiquetas y si la información les resulta atractiva, sorprendente o misteriosa, puede que la misma intriga los empuje a querer saber algo más. Es entonces que pueden decidir buscar la información en los títulos y textos de paredes o a través de los otros recursos de comunicación que se les ofrezca. Las personas buscan comprender que es lo que están viendo. Se preguntan porque una obra está en el museo, para que se usó ese objeto, qué es lo que representa, en qué pensaba el artista, cuando y en qué contexto…

visitantes cabildo

Despertar y sostener la intriga es la habilidad de provocar una picazón que necesita rascarse.

Escribir etiquetas tanto como epígrafes es el arte de compactar lo substancial con elegancia. Al escribirlos convertimos a los objetos y obras de arte en palabras, en el intento de establecer puentes concretos entre ellos y las personas.

 

 

 

 

Sensibilidad e intensidad.

 Como calcular la intensidad de la luz

La exposición a la luz puede alterar la composición química de los objetos y cambiar su apariencia a través de la decoloración, incluso puede provocar la destrucción de la estructura física de los materiales más sensibles.

El daño provocado por la luz es acumulativo, la exposición total sobre una superficie es el producto de la intensidad de la luz (lux) y el tiempo (horas) de exposición.

Es muy importante conocer el nivel de exposición a la luz de las colecciones que se exhiben en el museo. Para realizar este control, si no se cuenta con un luxómetro, se puede medir utilizando una cámara réflex analógica con fotómetro incorporado, el procedimiento es el siguiente:

  • Verificar carga de batería.
  • Ajustar sensibilidad de la película en ASA 800.
  • Ajustar la velocidad de obturación en 1/60.
  • Colocar un cartón blanco mate (30 x 40 centímetros) en el lugar de incidencia de la luz por delante o en lugar del objeto a iluminar.
  • Enfocar la cámara de manera de ocupar todo el campo visual con el cartón.
  • Tomar la luz de incidencia sobre el cartón blanco evitando provocar sombras sobre el mismo.
  • Ajustar la apertura de diafragma (número f ) hasta que el fotómetro indique que es la correcta, registrar el número f resultante.
  • Dependiendo de la abertura que indique podemos calcular estas intensidades aproximadas:

Diafragma

Intensidad

f 4

50 lx

f 5.6

100 lx

f 8

200 lx

f 11

400 lx

f 16

800 lx

Con estas mediciones orientativas se puede definir la potencia necesaria de las lámparas, la distancia o calcular el uso de dimmers.

 

Sensibilidad de los materiales a la luz

Sensibilidad

Materiales

Intensidad

Acumulación anual

ALTA

Acuarelas, grabados, orgánicos, textiles, dibujos y pinturas sobre papel, tapices, etc.

50 lx
50.000 lux-h / año

MEDIA

Pintura al óleo, madera, hueso, cuero, marfil, lacas, témperas, etc.

100 a 150 lx
600.000 lux-h / año

BAJA

Metales, piedras, cerámica, esmaltes, vidrio, joyería, etc.

300 lx

Es conveniente realizar la evaluación del estado de situación de los objetos en la exhibición y registrar la medición de iluminación en las fichas o legajo de cada pieza. Se debe consignar a que iluminancia está expuesto cada objeto, desde y hasta qué fecha. De esta manera se puede calcular la acumulación de deterioro por luz que tendrán según pasa el tiempo y actuar en consecuencia.

La sala: consideraciones sobre iluminación.

 

david vincent 1

La percepción global del espacio es determinante para la experiencia del visitante, la luz es el componente esencial de la exhibición que hace posible tanto la visión del conjunto como la del detalle.

Las siguientes son algunas consideraciones a tener en cuenta sobre
la iluminación de salas:

  •  Considerar y evaluar la arquitectura del museo o de la sala dentro de la planificación de la iluminación, particularmente en las casas o edificaciones históricas.
  • Detectar las condiciones y el potencial de la iluminación natural del edificio y considerar aquella que revele la estética propia de la sala.
  • Conocer la orientación, el desplazamiento y la duración de la luz natural diurna. Esto permite detectar las áreas interiores que son iluminadas por el sol.
  • Conjugar y coordinar la luz artificial con la luz natural controlada, de forma de que entre ambas se establezca una ambientación adecuada.
  • Tener en cuenta la diferencia de color entre la luz diurna y la luz artificial (niveles de calidez y frialdad de la luz).
  • Impedir el ingreso y la exposición a la luz solar directa sobre las vitrinas, los objetos, cuadros, fotografías, mobiliario, gráficos y textiles expuestos. Solo la luz natural cenital, difusa y debidamente filtrada, es recomendable.
  • Bloquear el resplandor que entra por puertas y ventanas utilizando cortinas, persianas, postigos o colocando filtros en los vidrios.
  • Crear áreas de transición lumínica hacia el espacio de la exhibición facilita a los visitantes la adaptación paulatina de la visión. Por ejemplo: el oscurecimiento progresivo del hall de ingreso, pasillo, vestíbulo o antesala.
  • Tener en cuenta y corregir los reflejos que se pueden generar sobre los materiales de las superficies de techos, paredes, pisos, vidriados de vitrinas y de cuadros, puertas y ventanas, etc.
  • Controlar y evitar el deslumbramiento que puedan provocar los reflejos y las mismas fuentes de luz artificial y natural ubicadas dentro del campo visual del recorrido. El deslumbre provoca que el ojo no pueda adaptarse a la baja intensidad de las luces de la sala.
  • Corregir las fuentes luminosas artificiales situadas frente a la vista del observador (deslumbramiento directo) utilizando pantallas o difusores para evitar la visión del cuerpo brillante de las lámparas.
  • Instalar un circuito de luz general independiente para encender durante las tareas de mantenimiento y limpieza. Apagar las luces de la exhibición cuando no hay visitantes puede ahorrar en el consumo eléctrico y en horas innecesarias de exposición puntual sobre los objetos.
  • Colocar la caja de llaves y control de la iluminación cerca de la puerta de entrada. Las mismas deben ser accesibles sólo para el personal a cargo del museo.
  • Revisar periódicamente la correcta disposición y el direccionamiento de las luces.
  • Programar limpieza periódica del sistema de iluminación, la mayor pérdida de luminosidad de la instalación proviene de la suciedad depositada sobre las lámparas.
  • Registrar en la Guía de Procedimientos la secuencia de acciones de encendido y apagado, indicar los sectores y las llaves correspondientes a cada uno. Indicar claramente en el tablero el sector para cada llave y acompañar con el plano de ubicación en sala.
  • Solicitar asesoramiento para la instalación de luces e indicadores de emergencia.
Compilación y redacción Tam Muro.
 1 David Vincent. "Los invasores". 1967, 1968.